La taquicardia es la aceleración de los latidos cardíacos, que puede ser fisiológica, por ejemplo, cuando se realiza una actividad física intensa, o bien estar asociada a procesos patológicos, como la anemia, las hemorragias, el shock o la fibrilación articular.
Las fibras musculares del corazón deben contraerse al unísono para funcionar con normalidad. Los impulsos bioelécticos procedentes de un grupo de células ubicadas en la aurícula derecha rigen las contracciones del corazón; estos impulsos fluyen por caminos que comunican con las fibras musculares de las cuatro cámaras.
Cuando se daña cualquier parte de este complejo sistema de conducción se altera el ritmo regular de los latidos, y como resultado puede producirse diferentes trastornos del corazón, como paro cardíaco, fibrilación ventricular, fibrilación auricular, bloqueo cardíaco o taquicardia, entre otras.
Algunas sustancias, como el café, el té, las bebidas alcohólicas o el tabaco, pueden producir taquicardia en muchos casos.
Síntomas
El síntoma característico son las palpitaciones: se perciben una aceleración del corazón acompañada por una sensación de ansiedad, aunque también pueden presentarse otros síntomas, como dificultad respiratoria, desmayos y un dolor agudo en el pecho.
Tipos de taquicardia
Fibrilación auricular: Se trata de un trastorno común que puede derivar de otras enfermedades, como la insuficiencia cardíaca, el hipertiroidismo o las anomalías de la válvula mitral. El tratamiento consiste en la administración de fármacos, para disminuir el ritmo cardíaco, y en la descarga eléctrica.
Síndrome de Wolffe, Parkinson & White(WPW): Este trastorno produce taquicardia paroxística. En el corazón existe un tejido conductor eléctrico anormal entre las aurículas y los ventrículos, que crea un círculo de impulso eléctrico que conduce a la taquicardia. Para el tratamiento se administran fármacos que disminuyan el ritmo cardíaco.
Taquicardia paroxística: Crisis con una aceleración anormal superior a 160 latidos por minuto. Se manifiesta con palpitaciones, dificultad respiratoria, desmayos y dolor en el pecho. Se trata con fármacos betabloqueantes.
Taquicardia sinusal: Es el aumento normal del ritmo cardíaco cuando se realiza una actividad física intensa, o cuando se sufre ansiedad.
Taquicardia supraventricular: Se caracteriza por impulsos muy rápidos pero regulares, procedentes de las aurículas o del nódulo auriculoventricular. El tratamiento se basa en una descarga eléctrica, para los episodios aislados, y en la administración de fármacos.
Taquicardia ventricular: Consiste en latidos cardíacos rápidos originados en los mismos ventrículos, y por lo general se produce después de un infarto de miocardio, sobre todo durante los primeras horas. El tratamiento consiste en descargas eléctricas, para los ataques aislados, y fármacos.
La taquicardia se puede observar por medio de:
Un Electrocardiograma.
Un estudio de electrofisiología intracardíaca (EPS).
Un electrocardiograma ambulatorio continuo (monitor Holter).
Registros de Electrocardiograma ambulatorio superiores a 24 horas.
Se pueden realizar exámenes de química sanguínea y otros.
Las fibras musculares del corazón deben contraerse al unísono para funcionar con normalidad. Los impulsos bioelécticos procedentes de un grupo de células ubicadas en la aurícula derecha rigen las contracciones del corazón; estos impulsos fluyen por caminos que comunican con las fibras musculares de las cuatro cámaras.
Cuando se daña cualquier parte de este complejo sistema de conducción se altera el ritmo regular de los latidos, y como resultado puede producirse diferentes trastornos del corazón, como paro cardíaco, fibrilación ventricular, fibrilación auricular, bloqueo cardíaco o taquicardia, entre otras.
Algunas sustancias, como el café, el té, las bebidas alcohólicas o el tabaco, pueden producir taquicardia en muchos casos.
Síntomas
El síntoma característico son las palpitaciones: se perciben una aceleración del corazón acompañada por una sensación de ansiedad, aunque también pueden presentarse otros síntomas, como dificultad respiratoria, desmayos y un dolor agudo en el pecho.
Tipos de taquicardia
Fibrilación auricular: Se trata de un trastorno común que puede derivar de otras enfermedades, como la insuficiencia cardíaca, el hipertiroidismo o las anomalías de la válvula mitral. El tratamiento consiste en la administración de fármacos, para disminuir el ritmo cardíaco, y en la descarga eléctrica.
Síndrome de Wolffe, Parkinson & White(WPW): Este trastorno produce taquicardia paroxística. En el corazón existe un tejido conductor eléctrico anormal entre las aurículas y los ventrículos, que crea un círculo de impulso eléctrico que conduce a la taquicardia. Para el tratamiento se administran fármacos que disminuyan el ritmo cardíaco.
Taquicardia paroxística: Crisis con una aceleración anormal superior a 160 latidos por minuto. Se manifiesta con palpitaciones, dificultad respiratoria, desmayos y dolor en el pecho. Se trata con fármacos betabloqueantes.
Taquicardia sinusal: Es el aumento normal del ritmo cardíaco cuando se realiza una actividad física intensa, o cuando se sufre ansiedad.
Taquicardia supraventricular: Se caracteriza por impulsos muy rápidos pero regulares, procedentes de las aurículas o del nódulo auriculoventricular. El tratamiento se basa en una descarga eléctrica, para los episodios aislados, y en la administración de fármacos.
Taquicardia ventricular: Consiste en latidos cardíacos rápidos originados en los mismos ventrículos, y por lo general se produce después de un infarto de miocardio, sobre todo durante los primeras horas. El tratamiento consiste en descargas eléctricas, para los ataques aislados, y fármacos.
La taquicardia se puede observar por medio de:
Un Electrocardiograma.
Un estudio de electrofisiología intracardíaca (EPS).
Un electrocardiograma ambulatorio continuo (monitor Holter).
Registros de Electrocardiograma ambulatorio superiores a 24 horas.
Se pueden realizar exámenes de química sanguínea y otros.